Aprender a extraerse la leche materna y a almacenarla puede facilitar su regreso al trabajo y hacerlo menos tensionante. Esto requiere algo de trabajo y planeación cuidadosa; pero puede hacerse.
Si usted va a extraerse leche de sus senos cuando regresa al trabajo, practique durante una o dos semanas antes de que tenga que volver al trabajo para acostumbrarse a la rutina. Usted puede intentar extraerse justo antes de que su bebé come o se puede extraer la leche entre las lactancias.
Practicar en la casa le puede ayudar a usted a aprender cómo funciona la bomba. Durante este tiempo, usted también puede comenzar a almacenar leche materna para alimentar a su bebé cuando usted regrese a trabajar.
Es probable que cuando comienza a extraerse no pueda obtener mucha leche. Después de unos días de extraerse leche con regularidad, sus senos comenzarán a producir más leche. Además, mientras más leche se extrae con su bomba más leche le producen sus senos (mamas). Usted debe tomar muchos líquidos para mantenerse hidratada lo cual le ayudará con su suministro de leche.
Extraer leche de sus senos toma más o menos la misma cantidad de tiempo que lactar al bebé; pero con práctica y una buena bomba, usted se puede extraer leche de los senos en tan sólo diez a quince minutos. Mientras está en el trabajo, trate de extraerse con la misma frecuencia con que usualmente lacta a su bebé o durante 15 minutos cada vez que pasan unas cuantas horas. Para mantener el suministro de leche, cuando estén juntos, lacte al bebé más veces. Usted también puede extraerse leche enseguida lacta a su bebé, lo cual ayudará a que sus senos produzcan más leche.
Sí, su bebé probablemente querrá más leche cuando está pasando por fases aceleradas de crecimiento. La mejor manera de aumentar su suministro de leche para una fase acelerada de crecimiento es lactar o extraer con más frecuencia.
La leche materna puede almacenarse en una botella plástica o de vidrio con un tapón sellante, o en una bolsa estéril que se pueda sellar. Almacene su leche materna en cantidades que use cada día para evitar malgastarla. Por ejemplo, si su bebé toma 4 onzas de leche en cada lactancia, coloque 4 onzas de leche materna en el recipiente de almacenamiento.
La leche materna que ha sido extraída debe enfriarse en una nevera o en algún otro sistema de refrigeración lo más pronto posible. La leche también puede congelarse si no se va a usar enseguida.
Las siguientes son algunas pautas generales para el almacenamiento de leche materna:
La leche materna puede variar de color. Puede tener color azuloso, amarillento o amarronado. También es normal que la leche materna se separe; la parte grasa de la leche se va a la parte superior. Sacuda la botella o la bolsa sellada y la grasa se mezclará con el resto de leche.
Descongele la leche lentamente agitando con movimientos circulares la leche en el recipiente en que esta se encuentra, después de colocarla dentro de otro recipiente con agua tibia, o de poner el recipiente en que la leche se encuentra en la nevera el día antes de usarla. No use agua caliente para descongelar la leche materna. Nunca descongele leche materna congelada en un horno microondas. La leche podría calentarse demasiado y quemarle la boca a su bebé. Calentar en el microondas también podría destruir proteínas valiosas en la leche materna.
La leche descongelada puede refrigerarse hasta por 24 horas, pero no debe volver a congelarse.
Returning to Work While Breastfeeding by Frances Biagioli, M.D. (American Family Physician diciembre 01, 2003, http://www.aafp.org/afp/20031201/2199.html)
Escrito por personal editorial de familydoctor.org.
Revisado/actualizado: 08/10
Creado: 01/05