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Días Feriados y Fiestas

celebraciones de fiestas con niños

Los días de fiesta son un buen tiempo para reunirse con familia y amigos. Las celebraciones de días festivos y otras actividades presentan muchas oportunidades para reducir el desecho a través de la reutilización y el reciclaje.

Aproximadamente 33 millones de árboles de Navidad son vendidos en Norteamérica cada año. Después de las vacaciones, busque maneras para reciclar su árbol en vez de mandarlo a un vertedero. Consulte con el departamento de desechos sólidos de su comunidad y averigüe si recolectan los árboles y los convierten en pajote. Es posible que su ciudad use el pajote hecho de árboles para los caminos para excursiones a pie y las barreras para evitar la erosión de las playas.



Compre un árbol en maceta y plántelo después de las fiestas.

¡Tenga una fiesta para crear sus propias decoraciones! Invite a su familia y amigos a crear y usar decoraciones tales como ornamentos hechos de tarjetas viejas o masa de galletas, guirnaldas hechas de palomitas de maíz o arándanos, coronas hechas de ramas y flores artificiales, y popurrí hecho de especias de cocina como la canela y los clavos.

Apague o desenchufe las luces de fiestas durante el día. Al hacerlo no sólo ahorra energía, sino que también ayuda a que sus luces duren más tiempo.

Si va a comprar tarjetas nuevas esta temporada de fiestas, envíe tarjetas con contenido reciclado. El comprar reciclado alienta que los fabricantes hagan disponibles más productos con contenido reciclado. Considere hacer tarjetas nuevas con papel sobrante o use las portadas de tarjetas viejas poniéndoles tapas posteriores nuevas. ¡Esto puede ser un proyecto de arte para la familia y los amigos que ayuda a todos a reducir el desecho de papel mientras ahorra dinero! Otra opción es quitar las portadas de las tarjetas y usarlas como postales. También considere mandar las tarjetas electrónicas, y recuerde reciclar todas las tarjetas de papel que reciba.

Piense de forma "verde" cuando vaya de compras para las ventas de fiestas y cumpleaños. Trate de comprar artículos con un mínimo de embalaje y/o hechos de contenido reciclado. Verifique las etiquetas de productos para determinar si un artículo puede ser reciclado y si esta hecho de materiales reciclados.

Considere la durabilidad de un producto antes de comprarlo como regalo. Los artículos más baratos y menos duraderos normalmente se gastan más rápidamente, creando desecho y gastándole dinero. Busque artículos que encarnan el concepto de la reutilización. Por ejemplo: los columpios hechos de llantas usadas, los juguetes de madera hechos de madera triturada, los estuches de arte que aprovechan los materiales usados o desechados, y las tablas de dibujo que pueden ser borradas y reutilizadas.

Miles de bolsas de compra plásticas y de papel terminan en los vertederos cada año. Reduzca el número de bolsas tiradas llevando bolsas de tela reutilizables al ir de compras para las fiestas. Dígale a los vendedores que no necesita una bolsa para las compras pequeñas o de gran tamaño. Use las bolsas de tela reutilizables en vez de las desechables para pedir dulces.

Envuelva los regalos en papel usado o con tiras cómicas. También recuerde guardar o reciclar el papel de regalo usado. Dé regalos que no requieran mucho embalaje, como boletos de conciertos o certificados para regalos.

Done a beneficencias los juguetes más viejos que sus hijos ya no usan. También pregunte en las bibliotecas locales. Varias bibliotecas públicas han extendido sus secciones para niños para incluir una colección para prestar juguetes, juegos de mesa, rompecabezas, instrumentos musicales, y cosas así.



Aproximadamente el 40 por ciento de todas las ventas de baterías ocurren durante la temporada de fiestas. Compre baterías recargables para acompañar sus regalos electrónicos, y considere regalar también un recargador de baterías. Las baterías recargables reducen la cantidad de materiales potencialmente dañinos que son tirados, y pueden ahorrar dinero a largo plazo.

Al dar flores como regalos, considere comprar flores de seda, plantas en maceta, o arbustos o árboles vivos que pueden ser plantados en la primavera como regalos.

Cocine galletas y otros dulces para sus amigos y personas queridas y enváselos en recipientes reutilizables y/o reciclables como regalos. Los dulces hechos en casa demuestran su cariño y le ayudan a evitar el desecho de embalaje.

Si tiene una fiesta, ponga servilletas de tela y platos, vasos, y cubiertos reutilizables en la mesa. Considere alquilar servicios de mesa más formales que no usará con tanta frecuencia. También guarde y vuelva a usar los sombreros, las decoraciones, y los obsequios.

Después de las festividades, ponga las sobras de comida en contenedores reciclables, y compártalas con su familia, amigos, u otros. Done las sobras de comida de las fiestas que estén enteras y sin tocar a un banco local de comida o a un albergue para las personas sin hogar.

Cuando sea posible, haga abono con las sobras de comida, las hojas, y los recortes de césped.

Después de fiestas, llene su lavaplatos a capacidad antes de usarlo. Hará menos ciclos, lo cual ahorra energía.

Lave y reutilice las jarras vacías de vidrio y plástico, las botellas de leche, las latas de café, los recipientes de productos lácteos, y otros recipientes semejantes que de otra forma serían botados. Estos recipientes pueden ser usados para almacenar las sobras, así como también botones, clavos, y otros artículos sueltos.

Aproveche al máximo su lámpara de calabaza. Use la carne para hacer una tarta de calabaza o panecillos y ase las semillas para una merienda divertida de fiestas. Cuando terminan las fiestas, corte su calabaza partida antes de que se estropee y tírela al cajón de abono.

¿Por qué compra un disfraz para la Víspera de Todos los Santos que probablemente usará solamente una vez y después botará? En cambio, use ropa vieja o compre ropa usada de una tienda de consignación para hacer su disfraz.

Considere donar disfraces viejos a producciones de teatro para aficionados locales, incluyendo representaciones y espectáculos puestos por organizaciones benéficas. Otra opción es donar los disfraces a un servicio de alquiler.

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