Traducido del inglés: miércoles, 16 de enero, 2013
Por Genevra Pittman
NUEVA YORK (Reuters Health) - Un nuevo estudio sugiere que
recordarles a los médicos y a los pacientes que la bronquitis es
casi siempre viral y no se elimina con antibióticos reduciría
las indicaciones innecesarias de esos fármacos.
Esto es importante porque la utilización excesiva de
antibióticos provoca resistencia a esos fármacos, lo que aumenta
la virulencia de las futuras infecciones y dificulta el
tratamiento con estos medicamentos.
"La gente debe comprender que los antibióticos no son
inocuos", dijo el doctor Ralph Gonzales, autor principal del
estudio de la University of California, en San Francisco.
En cuanto a la bronquitis, agregó: "Podemos asegurar que
(los antibióticos) no van a ayudar y causarán problemas". Es que
además de generar resistencia, pueden tener efectos adversos,
como malestar estomacal y diarrea.
En el sistema de salud de Pensilvania, donde el equipo de
Gonzales realizó el estudio, tres cuartos de los pacientes con
bronquitis estaba recibiendo una receta de antibióticos.
El equipo analizó dos estrategias para reducir esa cifra. Un
tercio de los consultorios colocó carteles sobre cuándo hay que
utilizar antibióticos y cuándo no hay que hacerlo y entregó
material informativo.
En otro tercio de los consultorios, los enfermeros recibían
una señal de alerta electrónica para entregarles a los pacientes
un folleto cuando un médico escribía el síntoma "tos" en su
historia clínica. Con el resto de los consultorios se formó un
grupo de control.
El equipo analizó la información de unas 10.000 consultas
previas al experimento y unas 6.000 visitas después de la
implementación de los carteles, los folletos y las señales de
alerta. Todas habían sido en invierno.
La cantidad de pacientes con bronquitis a la que se le
indicó el uso de antibióticos no varió o aumentó en los
consultorios del grupo de control, mientras que bajó del 80 al
68 por ciento con el uso de los carteles y de los folletos y del
74 al 61 por ciento con las señales de alerta, según publica
JAMA Internal Medicine.
Esos resultados aún son demasiado altos para los autores,
aunque Gonzales opinó que son un avance. Dijo que "sería una
buena idea que los consultorios donde se quiere reducir el uso
de antibióticos contra la bronquitis coloquen carteles durante
la temporada de tos y resfríos".
Y aclaró que los pacientes deberían esperar que la tos dure
unos 10-14 días.
Los tratamientos adecuados para la bronquitis son los
supresores de tos y los humidificadores. A veces los pacientes
desarrollan una infección sinusal o reflujo, que podrían
provocar la tos, agregó Gonzales.
Pero explicó que si los pacientes no tienen fiebre alta o
dificultad para respirar, seguramente no tienen algo más grave
ni neumonía bacteriana, y no necesitan antibióticos.
"La tos no debería ser suficiente para indicar un
antibiótico", coincidió Betsy Foxman, epidemióloga especializada
en resistencia a los antibióticos de la University of Michigan,
en Ann Arbor.
FUENTE: JAMA Internal Medicine, online 14 de enero del 2013
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