El virus del papiloma humano genital (también conocido como VPH) es la infección de transmisión sexual (ITS) más frecuente. Existen más de 40 tipos de VPH que pueden infectar las zonas genitales de los hombres y las mujeres. Estos tipos de VPH también pueden infectar la boca y la garganta. La mayoría de las personas que se infectan por el VPH ni siquiera saben que lo están.
El VPH no es igual al virus del herpes o al VIH (el virus que causa el sida). Todos estos virus se pueden transmitir durante el contacto sexual, pero causan síntomas y problemas de salud distintos.
La mayoría de las personas infectadas por el VPH no presenta síntomas o problemas de salud por la infección. En el 90% de los casos, el sistema inmunitario del cuerpo elimina el VPH de manera natural en un lapso de dos años. Pero algunas veces, las infecciones por el VPH no se curan, y pueden causar:
Los tipos de VPH que pueden causar verrugas genitales no son los mismos que los que causan cáncer. No hay manera de saber cuáles personas con el VPH padecerán cáncer u otros problemas de salud.
Verrugas genitales: por lo general aparecen en las zonas genitales como un granito o pequeños grupos de granitos. Pueden ser pequeñas o grandes, planas o elevadas o en forma de coliflor. Los profesionales médicos pueden diagnosticar las verrugas con solo mirar el área genital durante la consulta. Las verrugas pueden aparecer semanas o meses después del contacto sexual con una pareja infectada, aun cuando esta persona no tenga signos de verrugas genitales. Si no se tratan, las verrugas genitales pueden desaparecer, quedarse igual o aumentar en tamaño y en número. Las verrugas no se convertirán en cáncer.
Cáncer de cuello uterino: por lo general no presenta síntomas sino hasta que está en una etapa avanzada. Por esta razón, es importante que las mujeres se realicen periódicamente pruebas de detección del cáncer de cuello uterino. Estas pruebas pueden identificar signos iniciales de la enfermedad para que sean tratados en forma temprana, antes de que se conviertan en cáncer.
Otros cánceres relacionados con el VPH: pueden no presentar signos o síntomas sino hasta que estén avanzados y sean difíciles de tratar. Esto incluye cánceres de vulva, de vagina, de pene, de ano y cáncer de la cavidad orofaríngea (parte posterior de la garganta, incluidas la base de la lengua y las amígdalas). Para conocer los signos y síntomas de estos cánceres, visite www.cancer.gov.
Papilomatosis respiratoria recurrente: una afección en la que se forman verrugas en la garganta. Algunas veces puede bloquear las vías respiratorias, causando ronquera o dificultad para respirar.
El VPH se transmite por contacto genital, más a menudo por relaciones sexuales vaginales y anales. El VPH también se puede transmitir por las relaciones sexuales orales y el contacto entre los genitales. El VPH se puede transmitir entre parejas heterosexuales y homosexuales (gay), aun cuando la pareja infectada no tenga signos ni síntomas.
Una persona puede tener el VPH hasta años después de haber tenido contacto sexual con una pareja infectada. La mayoría de las personas infectadas no saben que están infectadas o que están transmitiendo el virus a su pareja sexual. También es posible contraer más de un tipo de VPH.
En muy pocos casos, una mujer embarazada que tiene el VPH genital puede transmitir el virus a su bebé durante el parto. Y, en casos muy raros, el bebé puede presentar papilomatosis respiratoria recurrente de comienzo juvenil.
El VPH puede hacer que las células normales de la piel infectada se vuelvan anormales. La mayoría de las veces, estos cambios en las células no se pueden ver ni sentir. En la mayoría de los casos, el cuerpo combate en forma natural el VPH y las células infectadas vuelven a su normalidad. Pero cuando el cuerpo no elimina el VPH, el virus puede causar cambios visibles como verrugas genitales o cáncer. Las verrugas pueden aparecer semanas o meses después de contraer el VPH. El cáncer suele demorar años en presentarse después de que se contrae el VPH.
VPH (el virus). Alrededor de 20 millones de estadounidenses están infectados actualmente por el VPH. Otros seis millones de personas contraen anualmente la infección por primera vez. El VPH es tan común, que al menos el 50% de las mujeres y los hombres sexualmente activos lo contraen en algún momento de su vida.
Verrugas genitales. En los Estados Unidos, cerca del 1% de los adultos sexualmente activos tienen verrugas genitales en algún momento.
Cáncer de cuello uterino. Todos los años, alrededor de 12,000 mujeres contraen cáncer de cuello uterino en los Estados Unidos. La mayoría de estos cánceres están asociados al VPH.
Otros cánceres que puede causar el VPH son menos frecuentes que el cáncer de cuello uterino. Todos los años, en los Estados Unidos, alrededor de:
Ciertos grupos de personas enfrentan un riesgo más alto de padecer algunos problemas de salud relacionados con el VPH. En estos grupos se incluyen los hombres homosexuales y bisexuales y las personas con sistemas inmunitarios débiles (como las que tienen VIH o sida).
La PRR o papilomatosis respiratoria recurrente es muy inusual. Se calcula que anualmente menos de 2,000 niños en los EE. UU. contraen papilomatosis respiratoria recurrente de comienzo juvenil.
Hay muchas formas en que una persona puede reducir su probabilidad de contraer el VPH:
Existen maneras de prevenir los posibles efectos del VPH en la salud, incluso los dos problemas más frecuentes: las verrugas genitales y el cáncer de cuello uterino.
Las pruebas de detección del VPH disponibles en el mercado solo se utilizan para evaluar a mujeres a cierta edad y que hayan tenido resultados específicos en sus pruebas de Papanicolaou para el cáncer de cuello uterino. No existe una prueba general para hombres o mujeres que detecte si una persona tiene el VPH, ni tampoco se cuenta con una prueba aprobada de detección del VPH para detectar el VPH en los genitales, la boca o la garganta.
No existe un tratamiento contra el virus, pero hay tratamientos para las enfermedades que el VPH puede causar:
Las verrugas genitales visibles las puede eliminar el propio paciente con el uso de medicamentos recetados, o también si va al médico para que le dé tratamiento. Algunas personas prefieren no tratarse las verrugas, para ver si desaparecen por sí solas. Ningún tratamiento es mejor que otro.
El cáncer de cuello uterino se puede tratar más fácilmente si se diagnostica y trata en su etapa inicial. Sin embargo, una mujer que se hace en forma periódica la prueba de Papanicolaou y tiene un seguimiento adecuado puede identificar problemas antes de que aparezca el cáncer. La prevención es siempre preferible al tratamiento. [Véase www.cancer.org]
Otros tipos de cáncer relacionados con el VPH también se pueden tratar más fácilmente si se diagnostican y tratan en etapas iniciales. [Consulte www.cancer.org]
La PRR se puede tratar mediante cirugía o medicamentos. En ocasiones, puede requerir de muchos tratamientos o cirugías durante varios años.