Traducido del inglés: lunes, 4 de febrero, 2013
NUEVA YORK (Reuters Health) - Los linfoceles sintomáticos
que aparecen después de la disección de nódulos linfáticos
retroperitoneales por un cáncer ginecológico se pueden tratar de
manera segura y efectiva con la fenestración laparoscópica,
según asegura un equipo de Alemania.
"Los resultados satisfactorios obtenidos en estudios previos
sobre pacientes tratadas después de un trasplante con
fenestración laparoscópica del linfocele como tratamiento de
primera línea se podrían extender a los antecedentes oncológicos
de la cohorte de nuestro estudio", afirma el equipo del doctor
Ingo B Runnebaum, del Hospital Universitario de Jena.
Los autores publican en BJOG que las mujeres con cánceres
ginecológicos suelen desarrollar linfoceles tras la disección de
los nódulos linfáticos pélvicos y paraaórticos. En las mujeres
con síntomas, el tratamiento de primera elección es la
aspiración percutánea del linfocele, pero con una alta
recurrencia.
La fenestración laparoscópica del linfocele o FLL fue
"cuidadosamente estudiada" en receptores de trasplantes renales.
Para evaluarla en el cáncer ginecológico, el equipo analizó los
resultados de la FLL como primera opción terapéutica en 102
mujeres que desarrollaron 132 linfoceles sintomáticos luego de
una disección de los nódulos linfático retroperitoneales.
Durante el procedimiento, se desafiaron las adherencias y se
identificó el linfocele meta. Luego, "se abrió el linfocele con
fórceps bipolares para crear una ventana con la extirpación de
gran parte de las paredes del linfocele", detalla el equipo. "Se
aspiró la linfa y se extirparon las loculaciones. Se coagularon
los márgenes del linfocele restante", agregó.
La duración promedio de la intervención fue de 115,6
minutos; en el 7,8 por ciento de los casos se debió cambiar a
una laparotomía. La tasa de complicaciones fue del 9,8 por
ciento durante la cirugía y del 5,9 por ciento después de la
intervención.
En los 60,4 meses de seguimiento, reaparecieron siete
linfoceles sintomáticos (6,9 por ciento). Para los autores, esta
frecuencia es significativamente más baja que la obtenida con el
drenaje percutáneo del linfocele y similar a la observada en
pacientes trasplantados (8,2 por ciento).
"Nuestros resultados sugieren que la FLL es un tratamiento
seguro y viable de los linfoceles sintomáticos que aparecen por
la disección de nódulos linfáticos retroperitoneales", indica el
equipo.
Pero en un comentario, el doctor Raj Naik escribe: "Aunque
los resultados revelan un bajo riesgo de recurrencia linfocítica
(6,9 por ciento) versus el enfoque más aceptado, como es la
aspiración guiada por ultrasonido, la tasa de complicaciones
acumuladas dentro y fuera del quirófano fue mucho más alta (15,7
por ciento)".
Naik, del Hospital Reina Elizabeth de Gateshead, Reino
Unido, agrega que "aunque esa frecuencia es menor que la
esperada con una laparotomía, un 7,8 por ciento necesitó un
enfoque abierto debido a los patrones macroscópicos de las
adherencias y la complejidad de la cirugía".
"El efecto de estos resultados en el manejo de las pacientes
con un cáncer ginecológico no debería subestimarse, en especial
cuando la frecuencia de los quistes linfáticos sintomáticos
sería del 16 por ciento", agregó.
FUENTE: http://bit.ly/WHSyrR
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