Ser dueño de un carro es una gran responsabilidad. Y aunque tal vez esté al tanto de cómo inflar las llantas correctamente o esté enterado de cuándo tiene que cambiar las escobillas del limpiaparabrisas, también tiene que saber algunas otras cosas muy importantes.

Por ejemplo, si usted sacó un préstamo para comprar su carro, usted no es el dueño del vehículo hasta que termine de pagar el préstamo. Si usted no paga, el prestador puede recuperar el carro. Quizás se sienta tentado por lo que prometen esas compañías que dicen que pueden bajar el monto de sus pagos mensuales si primero acepta pagarles un cargo. Hasta podrían llegar a decirle que pueden ayudarlo a parar el proceso de embargo del carro. Ponga el pie en el freno. Usualmente, esas promesas son mentiras o verdades a medias de estafadores que no tienen ninguna posibilidad de cumplir lo que dicen.

De hecho, la FTC recientemente radicó cargos contra  Auto Debt Consulting por tomar cientos de miles de dólares de dueños de carros y no ayudarlos como habían prometido.  Según la FTC, la compañía le dijo a las personas que no pagaran los préstamos de carros. Ese “consejo” hizo que el riesgo de embargo aumentara – y algunos consumidores que pagaron por ayuda perdieron su vehículo.

Si usted no pude cumplir con los pagos de su préstamo, usted tiene opciones, como por ejemplo, llamar directamente a su prestador. Lo mejor para todos es tratar de encontrar una solución. Vea nuestro nuevo video y lea más recomendaciones sobre cómo esquivar las estafas de refinanciación.