Pérdida del empleo

Los titulares de primera página relatan la historia: despidos y licencias temporarias, reorganizaciones y cierres. Si usted ha perdido recientemente su trabajo, es posible que lo primero que le venga a la mente sea: “¿Y ahora qué hago? ¿Cámo pagaré mis facturas?”

Lo que debe hacer

  • Comuníquese con el departamento de personal de su organización. Averigüe por cuánto tiempo continuará teniendo seguro de salud, si tiene derecho a un paquete de beneficios indemnizatorios por despido, y cuándo y cómo debe solicitar los beneficios de desempleo.
  • Comuníquese con sus acreedores. Trate de establecer un plan de pago modificado para reducir el monto de sus pagos a un nivel más manejable. No espere a que remitan sus cuentas impagas a un cobrador de deudas. Llegado ese momento, sus acreedores habrán perdido la confianza en su capacidad de pago.
    • Hipoteca – Consulte con su prestador o con el administrador de su hipoteca si hay alguna posibilidad de modificar su préstamo. Por medio de una modificación usted establece un acuerdo con el administrador de su préstamo para cambiar de manera permanente uno o más términos de su contrato hipotecario para poder afrontar los pagos mensuales con mayor facilidad. Las modificaciones pueden incluir la baja de la tasa de interés, la extensión del plazo del préstamo, o sumar el monto de las mensualidades impagas al total del préstamo. Una modificación de su préstamo también puede comprender la reducción del monto de dinero que usted adeuda sobre el préstamo de su residencia principal por medio de la condonación o cancelación de una parte de su deuda hipotecaria. Para consultar información sobre el plan del Presidente para ayudar a los propietarios de viviendas visite www.makinghomeaffordable.gov.
    • Alquiler – Pídale al propietario de su vivienda que le baje el monto del alquiler a cambio de una extensión del período de su contrato, o considere la posibilidad de mudarse a una unidad más pequeña y más económica dentro del mismo complejo de viviendas. También puede pesar en la posibilidad de buscar alguna persona que desee ocupar uno de los cuartos de su casa y compartir los gastos de alquiler.
    • Tarjetas de crédito – Haga todo lo posible para pagar el monto mínimo, y si puede pagar todo, mejor todavía. Consulte con la compañía o compañías emisoras de sus tarjetas de crédito acerca de sus programas para clientes con dificultades financieras – usted y el emisor de su tarjeta establecen un plan de pago y los emisores reducen las tasas de interés, y algunas veces el monto de sus pagos mensuales.
    • Préstamos de automóviles – Explore las opciones de refinanciación para disminuir el monto de sus cuotas, por ejemplo, puede intentar conseguir una tasa de interés más baja o extender la duración del préstamo. La desventaja de un préstamo de más largo plazo es que pagará más intereses. Si no necesita un vehículo, considere la posibilidad de venderlo, pero asegúrese de obtener una cantidad de dinero suficiente para por lo menos poder repagar el préstamo. Antes de vender el auto, revise el contrato de financiación para ver si el prestador le cobrará una multa por cancelación anticipada – es un cargo que se aplica por pagar parte o todo el saldo de su préstamo antes de tiempo – y averigüe el monto.
    • Seguro del auto – Considere aumentar el monto del deducible de su seguro. Si su póliza de seguro tiene un deducible de $200 y lo aumenta a $500, usted podría reducir el costo de la cobertura de accidente y todo riesgo hasta un 30%. Si tiene un auto viejo, considere la posibilidad de bajar el monto de la cobertura por accidente y/o todo riesgo. Si su auto vale menos de 10 veces el valor de la prima, el costo de la cobertura tal vez no sea un gasto lógico ni conveniente. Combine las pólizas de seguro; muchas compañías de seguro ofrecen descuentos en las primas de pólizas múltiples, como por ejemplo una póliza combinada de seguro de auto y vivienda.
    • Servicios de gas y electricidad – Consulte la disponibilidad de programas de asistencia para afrontar los costos de suministro de energía, planes ajustados a presupuesto y averigüe si hay fondos disponibles para emergencias.
    • Teléfono – La manera más fácil de ahorrar dinero en la factura de teléfono es eliminar los servicios innecesarios. Por ejemplo, hay muchas compañías que ofrecen paquetes de servicios telefónicos por una tarifa de bajo costo que incluyen una variedad de prestaciones tales como correo de voz, llamada en espera, identificación de llamadas. Es cierto que el precio final puede ser conveniente, pero si usted no usa todos esos servicios con regularidad, está pagando de más por servicios innecesarios. Si usted tiene una línea de teléfono fija en su casa y una línea de teléfono celular, considere la posibilidad de eliminar una de las dos. También podría considerar la opción de pasarse al servicio de voz sobre protocolo de Internet (VoIP) que en lugar de usar una línea telefónica normal funciona por medio de una conexión de Internet de banda ancha. El sistema VoIP convierte su llamada telefónica en una señal digital que se transmite por Internet hasta la línea de destino de la llamada.
    • Conserve su seguro de salud. Si es posible, pásese al plan de seguro de su cónyuge/compañero. Si no es posible, tal vez pueda conservar su cobertura de salud bajo la ley federal COBRA que permite que los trabajadores desempleados mantengan su seguro colectivo de salud por un período que generalmente puede llegar a los 18 meses. Usted pagará la prima completa (incluida la parte que anteriormente pagaba su empleador), que puede resultar bastante cara, más el 2% por cargos administrativos. Otra opción es comprar su propio seguro de salud. La ventaja de esta opción es que puede ahorrar en las primas mensuales reduciendo el nivel de la cobertura a sus necesidades esenciales. Si debido a la pérdida de su empleo tiene ingresos escasos o ningún ingreso, podría recurrir a Medicaid.